
La gente se amontona para comprar los regalos de navidad porque la oferta es más amplia que en otros sectores comerciales. De modo que uno va, hace sus compras, y sale feliz con sus regalos y a la vez aterrado por la congestión y la dificultad para movilizarse. Uno no quiciera meterse al HUECO, pero toca. Quién dijo: "No me extraña que nadie quiera venir aqui: todo está abarrotado de gente".
No hay comentarios:
Publicar un comentario